Dos almas enamoradas, un mundo de dos.
Tu mirada con la mía, tu fuerza y valor, luchando por siempre y la historia, comenzó.
Desbaratamos tiempo, desbaratamos, enojos, de un pasado de guerras, que sólo dejaba a su paso, rencor.
Hoy amo a mi enemigo y le entrego mi corazón.
Que entré nuestro cielo, un fruto nos envió y unirá a un pueblo perdido.
Bendecido por este amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario